Autorretrato 3

Un autorretrato tridimensional
A diferencia de la pintura, donde el autorretrato tiene ya una larga tradición, los escultores rara vez se representan a sí mismos. Esto está relacionado con las dificultades técnicas y físicas del género. Un pintor dispone en de un espejo, un lienzo y pintura para realizar su imagen. Para los escultores, que trabajan tridimensionalmente, esto es mucho más complicado.

Obstáculos técnicos y físicos
Para mi tercer autorretrato, Autorretrato 3, me reté artísticamente creando un escenario como el de un pintor, con un espejo. Sentado frente a un espejo, utilicé silicona y escayola líquida para hacer los moldes necesarios para un molde de mí mismo en bronce, sin ninguna ayuda. Estas limitaciones físicas determinaron el resultado final de la escultura. En el proceso, he superado varios obstáculos técnicos y físicos como escultor.

Un autorretrato como escultor
Como mis brazos no llegaban lo suficientemente lejos, la parte trasera del Autorretrato 3 quedó abierta y, como resultado de que mantuviera los ojos abiertos lo necesario, los ojos faltan en la imagen. De este modo, Autorretrato 3 se inscribe en el rico marco tradicional: un autorretrato de escultor, realizado en el marco de un pintor.