El cuerpo humano como estructura
A veces el cuerpo humano puede parecer una estructura, una arquitectura por la que se puede caminar. Su propio cuerpo como
una ciudad en la que sus habitantes conviven. Esta es mi propia ciudad, en la que mis principales portadores de información
de mi identidad: mi esqueleto junto con mi piel.
El esqueleto como entidad independiente
Los 172 huesos, obtenidos a partir de una tomografía computarizada de mi propio esqueleto, están envueltos en una funda bien cosida,
Hecho de un molde de silicona de mi propia piel. Así, la cubierta forma una piel cerrada y cada parte
de “mi” esqueleto una entidad independiente y separada.